miércoles, 26 de septiembre de 2018

YO NO FUI , FUE TETE.





                                                         YO NO FUI FUE TETE    


No te escondas en el lamento
Sólo ámate a tí mism@ y listo
Estoy en el camino correcto
baby Nací de esta manera.

Lady Gaga

Quizá la culpa es mía
Por no seguir la norma
Ya es demasiado tarde
Para cambiar ahora
Alaska
                                       br fiebre de sabado por la noche ( saturday night fever ) -                


Teódulo Terrones va a cumplir 65 años es un tipo que  la vida le sonríe,  departamento en Miami frente a la playa, un Audi del año , administra las propiedades de su novio. Su padre le puso Teódulo en recuerdo A un futbolista de apellido Legario.

Pero a él  nunca le gusto el futbol. Si, los futbolistas pero no jugar ese rudo deporte. Desde niño su padres advirtieron que el pequeño Teódulo era diferente a los otros niños, su padre se hizo el cojudo y su mama lo protegió mas, Tete le decía por las iniciales de sus nombre y apellido, ese sobrenombre cariñoso  y delicado contribuyo a formar su personalidad.

Delgado de finos modales, creció alejado del papá y muy cerca de mami que no le molestaba que su crio fuera como era y no intento corregir su manera de ser ni  decirle que debía tener un comportamiento más varonil, como se lo había insinuado un hermano.

  Entro al colegio, no llegaba a ser afeminado, pero no era tosco ni agresivo, pero los compañeritos siempre crueles, lo molestaban cuando le decían para jugar futbol, y él no iba aduciendo un problema de salud. Nunca llego a jugar futbol pero estaba con los compañeros, a lo más iba por la pelota cuando esta salía disparada por detrás del arco. El colegio era mixto y la tolerancia era uno de los postulados, los compañeros de a poco aceptaron sus ambigüedades, y olvidaron de molestarlo, solo de vez en cuando un chiste cruel, una empujada, cosas menores con los que aprendió a convivir.
Ya en secundaria con la pubertad en pleno florecimiento, si  comenzaron los problemas para acentuar la masculinidad más de uno lo reto a agarrarse a trompadas , sabiendo que si le podían pegar, pero Tete no aceptaba ningún reto a pesar de recibir patadas o puñetes, no entro en riñas, ante la burla de los compañeros , es una etapa importante en el colegio establecer jerarquías, quien pega a quien, quien pega a todos, quien es el más machito , quien es el capitán del equipo de   fulbito, quienes escogen en los recreos a los miembros de sus equipos para jugar . Tete se apartaba,  tenía una amiga que jugaba vóley una morena fuerte que tenía más cuerpo que muchos de nosotros con ella pasaba los recreos, se iban juntos a la salida, era media ahombrada, nada delicada, a las otras compañeras no le gustaba quedarse a solas con ella creo que le temían, su nombre era Carmen y en el  colegio le decían Chumpi, porque tenía unas piernasas y una vez le metió una patada a un chico mayor que se fue corriendo.

Cuando llegamos a cuarto de media Teódulo,  era un chico alto y delgado, estudiante medio no sobresalía en ningún curso,  pasaba los cursos tranquilo sin mayores esfuerzos, nos hicimos amigos a fuerza de estudiar juntos matemáticas donde me ayudaba a terminarlas tareas que me costaba mucho hacerlas, él y la Chumpi, tenían sus cuadernos limpios ordenados al día,  lo que yo no podía lograr, me la pasaba  jugando fulbito o pensando en el campeonato profesional , cuando se acercaban los términos para entregar tareas o dar pruebas me acercaba a ellos y me ayudaban.

La anécdota que lo marco en el colegio fue en una clase de religión donde el sacerdote le  da a leer un pasaje de la Biblia  Apocalipsis 19 11-16 y lee y hay una parte que dice Rey de Reyes bueno  el popular Clavel así  lo habían rebautizado tenía un defectillo, un frenillo que no le permitía pronunciar la r con claridad, y dijo Gey de Geyes. Ante la burla del salón y por eso de  ves en cuanto le decía gey de geyes. Con el tiempo la palabra gay  por homosexual se popularizo y años después en las reuniones de la promoción preguntábamos por Gay de Geyes. 

Los domingos nos encontrábamos en las mañanas porque íbamos con nuestras madres en el mercado, ayudando a cargar la canasta, era como otro centro de encuentro, también iba Carlos uno de mis buenos amigos, Nancy trabajaba con su padre en una ferretería pasábamos a saludarla y distraerla  un rato, también estaba Fredo que trabajaba con su padre que era carnicero. A mi mama no le gustaba que me juntara con Teódulo, por que el señor Gómez de las frutas, le decía  -  tanto juntarse con ese chico raro, se le va a pegar a su Toño-

A mediados de cuarto de media por Junio  llegaron al colegio una chica y  un chico trasladado de  un colegio en provincia,  un fuerte terremoto que había destruido su colegio y la ciudad. Él se llamaba Julio y de llegada se le prendió a Clavel,  un día le quiso pegar , yo salí a defenderlo, y la chocamos para la salida para trompearnos,  la verdad que yo no me había agarrado a golpes con nadie de mis compañeros , con la mayoría veníamos desde primaria, pero ya pactada la bronca no podía echarme para atrás, la gente  me daba algunos consejos, otros se burlaban va a defender a su chica decían mientras se reían, me había metido en un problema absurdo, como seria costumbre en mi vida adulta.

Llego la hora de salida y el encuentro era detrás de la cancha de futbol una pared que daba a un terreno descampado, la gente fue. Yo fui con Carlos que era algo así como mi entrenador, y Julio, que era más grande que yo iba con un grupo de chicos de tercero de media Teódulo había desaparecido, cuando la el circulo estaba listo, y la gente a la expectativa el árbitro un amigo que con el tiempo llegaría a ser juez, nos instaba a  pelear limpio, cara a cara, puso la mano en el medio y - dijo a ver quién escupe primero-

Cuando estábamos  por escupirnos y Felipe, el árbitro por sacar la mano para que los salivazos llegaran a las caras  y comenzara la bronca, llego Teódulo, Carmen y su hermano Jorge que estaba en quinto de media, el arquero de la selección del colegio,  le decían negro Koki, el negro que nos llevaba una cabeza los dos se acercó y nos dijo con voz ronca

 – En MI colegio nadie se bronquea sin mi permiso-  ¿Algún problema?-, pregunto  Koki.

 Nos conocíamos años del barrio, de jugar fulbito, porque era amigo de sus hermana, más de una vez había ido a su casa a pedirle prestado el cuaderno.

Nos miró y los dos a la vez, dijimos, - no, no ninguno – creo que Julio tampoco quería pelearse pero tampoco podía echarse  atrás . Dense la mano , acá no pasó nada, la concurrencia decepcionada y molesta con el negro Koki, se retiró.

Jorge se fue solo, yo me quede con  Carmen y Teo , Julio se alejó con los chicos de tercero, después nos haríamos  amigos ,  jugaba muy bien de defensa y paso a ser de la selección del colegio defendiendo el arco de Koki.

El asunto fue que la gente siempre se acordaba que saque cara por Clavel .y me molestaban  que era el noviecito,  que algo  había, no les hacía mucho caso y la amistad con Teo se mantuvo .

Carmen estudio  educación física y era entendible  era  deportista, pero Teódulo Tete Terrones nadie entendía porque también se puso estudiar lo mismo , nunca lo vimos hacer deporte, a lo más alguna vez nos mostró una revista de hombres musculosos fisicoculturistas.

Yo estudie Derecho  mi viejo era abogado y me ordeno estudiar eso,  al  viejo se le obedecía sin duda ni murmuraciones. Pasaron los años y la amistad con Tete siguió , nos daba cosa verlo con su buzo  su silbato colgando de un lazo del cuello,  un folder con un periódico dentro, nunca se quejó  lo hacía con resignación, como quien dice que se hace así es la vida, solo lo vimos con una chica para la fiesta de promoción  la hermana de un compañero del colegio, una flaquita calladita, con la que llego de la mano, y bailo con ella toda la fiesta, alguien dijo que lo había visto besándola pero nadie confirmo .
Pasaron los años y nunca lo vimos tomar alcohol, ya no era Tete  ni Clavel, era Teo un soltero cuya afición era el cine y ver el futbol en la liga de futbol del distrito .hasta que se enamoró y no tuvo que confesarlo, aunque a nadie le llamo la atención, lo sabíamos.

Fiebre de sábado por las noche  John Travolta, un amor descontrolado lo amo desde la primera película , desde antes que la estrenaran, me conto que la vio al menos treinta veces,  en el cine , todavía no existía los videos . Se sabía la película de memoria, los pasos, bailaba cantaba las canciones, caminaba como el, se vestía como él .Dejo el magisterio, se incorporó a un grupo de baile que trabajaba en las discotecas y clubs. Una vez  lo acompañe  a dejar unos polos a un chico enfermo , era mucho más joven  , lo vi ,estaba enamorado, de alguien real.

Durante meses lo iba a ver, hasta que se recuperó y salían juntos a todas partes. El chico estudiaba educación,  él lo  vestía y algún dinerillo le daba. Andaba contento, la vida le sonreía, salía con un chico, trabajaba bailando con chicos lindos, nadie le decía nada. Yo era como su confidente me contaba que salía con el que lo quería, no me contaba detalles íntimos, era más bien romántico la parte escabrosa no la tocaba, pero dos adultos libres hacían las cosas que querían sin darle cuanta a nadie.

Ya estaba casado tenía dos niñas y poco tiempo, los fines de semana pasaba por casa, se quedaba almorzar o a veces traía cosas y cocinaba. Conversábamos, me contaba sus cosas tenía mi comprensión y discreción.

Cierta vez  me pidió acompañarlo a comprar  un disco, era de Emmanuel, todos se derrumbó, había terminado con el chico  una decepción y un profundo abatimiento lo embargaban.
- nunca me quiso, se aprovechó de mi- me conto, no quise preguntarle detalles  pero lo marco  le costaba confiar en los chicos que se le acercaban, estableció una relación de mutua conveniencia los ayudaba  pero disfrutaba de   ellos. Había apartado el tema del corazón de las relaciones, salvo con un rubio futbolista al que idolatraba,   creo que él le guardaba cariño y respeto, pero ambos sacaban beneficios de su relación que además era discreta.

Teo era un buen tipo dispuesto a ayudar sin esperar recompensas , se hizo amigo de un tipo que tenía negocios en un puerto y fue  a trabajar con él , la pesca da mucho dinero y el administraba el negocio , el dueño de las embarcaciones sabia cuanto debía darle más o menos cada embarcación  y Teo las administraba bien , optimizo procesos,  estableció vínculos, mejoro contratos de compra y las ganancias subieron, comenzó a disfrutar de una gran liquidez de la que mayor detalle no daba  por que no se la pedían , el depositaba el dinero y el dueño contento. Era más de lo que el sacaba cuando él estaba.
Comenzó a ganar muy buen  dinero, además de negocios paralelos que realizaba al margen de la administración de las bolicheras, como comprar  motores redes y aparatos , compraba la pesca adelantada a pecadores menores y la vendía a las fabricas a mayor precio  la compraba con la plata que administraba y devolvía.

 Lo visite, vivía en  un  departamento muy bien arreglado   en un barrio feo, su closet era impresionante no menos de 50 camisas ,20 pares de zapatos decenas de colonias   los fines de semana salía a los clubs de ambiente gay, pero igual conocía a medio mundo, salía con el chico que le parecía, lo vestía lo usaba y descartaba, solo le advertí que tuviera cuidado con el sida, los puertos tenían un alto porcentaje de enfermos. Cuatro  cinco años de abundancia, poco ahorro por que la pesca es una entrada diaria de dinero, la flota aumento, la pesca era buena y  tenía la plata que quería, no ahorraba, el dinero en efectivo lo depositaba al dueño que vivía fuera del país y se quedaba con mucho efectivo en la caja fuerte para pagos a los pescadores mantenimiento y compras, todo viento en popa.

Pero las historias buenas tiene su final, la flota fue vendida de un momento a otro y Teo quedo fuera de la nueva administración, su ex jefe lo liquido con 50000 dólares, Teo pensó pude haberme quedado con medio millón y él no se hubiera dado cuenta, además que era un gastador y generosos mecenas de jóvenes. Vio que el dinero no le alcanzaría mucho tiempo y viajo  Miami donde por los negocios había ido varias veces.

Se instaló y comenzó de cero, tipo correcto , inteligente, entro de obrero a una empresa de eliminación de escombros de demoliciones, trabajaba con cubanos , que hacían la labor sin mayor entusiasmo ni imaginación , debían llenar camiones de escombros , Teo se dio cuenta que podía optimizar y ordenar el trabajo y se lo comento al dueño de la empresa y le explico que con su método en vez de sacar 10  camiones de escombros ordenándolos y con un pequeño cargador frontal podía hacerlo con la mitad de la gente  en 5 0 6 viajes, lo que significaba un fuerte ahorro , paso a ser capataz y pronto  jefe . sus ingresos se multiplicaron .se cambió de barrio y comenzó a frecuentar las discotecas de gays los saunas y clubs, por su carácter hizo amistades y amoríos ,los gringos tenían un enfoque más practico y no incluían el amor, pero Teo, siempre poniendo un plus a las relaciones rápidas les ponía algo personal , cariño algo que se parecía al amor y lo comenzaron a buscar , convirtiéndose por las noches en amigo de compañía de hombres con cierto poder económico , culto conversador simpático , cariñoso, se ganaba un muy buen dinero entre empresarios que lo buscaban,  además el disfrutaba de la compañía .

Fue ascendiendo en los clubs cada vez de mayor categoría los que se adaptaba con facilidad. Se convirtió en hombre de confianza de varios hombres adinerados, cuidaba las mansiones cuando salían de viaje, las mantenía ,  de los yates, le dejaban las tarjetas para los pagos  de las cuales nunca abuso o  mal uso, los ayudaba a vender propiedades sacando las mejores ventajas por lo que recibía comisiones interesantes, sin contar que le pedían su compañía en viajes y espectáculos, de pronto estaba en New York en el Open de tenis , en la final de la NBA, o el mundial de futbol de España ,era compañía, amante, confidente ,celestino seguridad y en especial amigo de confianza.

De vez en cuando me llamaba para contarme sus aventuras, comenzó a ir a un gym, contrato un personal trainer cubano que lo hizo crecer hasta convertirse en un tipo musculado, era su pareja le daba todo me contaba, le compro un carro y le pagaba por entrenarlo tan bien que el cubano quería casarse, se ponía celoso  de su habitual ritmo de vida.

Al poco tiempo comenzó a vivir  con un hombre mayor, su novio, un viejo inmenso tipo John Wayne,  T así lo llamaba el novio,  se había hecho algunas cirugías faciales,  con la camisa abierta con cadena de oro. Vino al Perú no visito a nadie se llevó al novio al Cusco, a la Selva, y antes de se, cenamos, me invitaron a visitarlos cuando quiera su departamento que  era inmenso.

Le administraba las muchas propiedades, estaba al tanto de sus inversiones en bolsa. Lo acompañaba a todos lados, además le permitía pequeñas licencias, escapadas. John  lo lucia en las reuniones, donde T  léase ti  era el centro de atención y donde hacia más de un contacto económico y de otros tipos.

Se hizo de un departamento que John se lo dio en un precio simbólico, compro  departamentos los  vendía, comenzó su propia carrera de corretaje además  jugando en la bolsa de New York, hizo una fortuna, siguió siendo un tipo simple me invita siempre a pasar temporadas en Miami que siempre postergo,  del resto de los compañeros del colegio casi no los recuerda o los olvido.

Teódulo Terrones, que su padre quería que sea futbolista, no pateo una bola en su vida, un buen tipo que la vida le sonrió y él le sonrió a la vida cumplirá años, solo, en Miami en una disco llena de gente.

PRIMAVERA electoral, A quien le importa.
   






miércoles, 19 de septiembre de 2018

SEÑORITAS JOVEN , SEÑORITAS,




                                             SEÑORITAS JOVEN, SEÑORITAS.

Anna y Patricia Sambuccetti  eran hermanas inseparables, tanto que se habían quedado solteras.   No se supo porque , eran guapas ,elegantes las dos profesionales una obstetriz y la otra farmacéutica siempre  con sus uniformes pulcros planchaditos , modositas siempre con una leve sonrisa , las dos habían tenido pretendientes como decían ellas , de categoría, médicos , profesionales, industriales,  a su decir no  cualquier cosa.

Altas espigadas, trabajaban en el mismo hospital, llegaban juntas y se iban juntas, salvo cuando tenían guardias y turnos que no coincidían.

 Caminaban  con cierto aire de una aristocracia  perdida, la espalda recta, sin mucho vulgar bamboleo, sin prisa  ,aunque que hay que reconocer que Patricita la más baja tenia mejores caderas y estaba mejor despachada , a diferencia de su hermanita que era delgada sin mayores curvas iban  con la nariz para arriba , la de Anna recta , y la de Patricita media respingadita.

Hacendocitas les decía una vieja farmacéutica rustica, y las imitaba, eran unos personajes del hospital, apenas sonreían , con un ligero fruncimiento  nasal , jamás abriendo la boca, ni risas estridentes ,si reían se tapaban la boca para no mostrar los dientes en su leve jijiji , en realidad no mostraban mucho de nada, recatadas al vestir eran.

Las conocí por los años del terrorismo y la gran inflación, entre a trabajar como asesor legal ,  poco tenía que ver con su labor, pero en una reunión por fiestas patrias, nos presentaron
– Garabito a sus órdenes, señoras– me presente.

–Señoritas, joven, señoritas- subrayaron casi al unísono.

Señoritas, me disculpe con una ligera venia.

– Ay, italiano, nuestros abuelos también eran italianos, de Génova -  me explico Patricia, mientras entablábamos una conversación ligera de salón.

De allí nos saludábamos  a veces conversábamos, las dos siempre juntas, me intereso Patricia que era más agraciada y más coqueta, la invite a salir. las tres primeras veces salimos los tres.

Le dije que me interesaba salir, a solas, con ella, hizo una mohín  como de sorpresa, tan jóvenes no eran,  se acercaban a los cuarenta. Me acepto y me dio su dirección para buscarla un viernes por la tarde, como a las seis  me advirtió, no salían,  en plural, de noche.

Llegue a buscarla a su  casa en Jesús María,  barrio de  clase media, frente al ministerio de trabajo cerca al Campo de Marte. Me hicieron pasar, una sala con muebles antiguos, y una araña colgando con luces amarillas, un aire de antigüedad flotaba en el silencio de la casa, con cuadros con fotografías en blanco y negro de personajes de principio de siglo   vivían solas, su padres había fallecido. Anna me invito un vaso de inca cola , sin mucho gas, y no pude dejar de ver que andaba con unas zapatillas de levantarse con un peluche blanco , eran como las que usaba una tía cuando era niño.

Salió Patricia, odiaba que le dijeran Paty, abrigo de cuero argentino hacia juego con su cartera, muy a la moda de los setenta.

 – No vayan a llegar muy tarde – nos apremió Anna,   con un dedito índice recriminatorio.

Fuimos a comer a un chifa, había sugerido una parrilla, pero prefirió algo suave de noche , por la digestión tu sabes me informo .  Le ofrecí un pisco sour que apenas bebió, disfrutamos la cena  que comió con discreción dejando siempre más de la mitad del plato y a las ocho y media me dijo para regresar  , no podía dejar tanto tiempo sola a su hermanita. Comprendí que sería una amistad  marcada por la estrecha relación con la hermana.

Llegue a declararle mi amor, y me dijo que lo pensaría, me invitaron a su casa a almorzar un domingo , me acepto bajo algunas reglas o premisas, no salía jamás más allá de las once de la noche , prefería que nos veamos en su casa, y que en el trabajo no deberíamos andar como novios ,  era una chica especial ,  fue un romance casto de besitos muy poco apasionados siempre en su casa , algunas veces fuimos al cine con la hermana, le daba pena dejarla sola , intente en alguna ocasión agarrarle  la pierna y me retiro la mano con una suave firmeza, una noche en la puerta de su casa la bese y me dijo –no , no , que van a decir los vecinos-. Entramos al vestíbulo y la tome con firmeza y la bese  de verdad y le tome un pecho, hizo una resistencia diplomática, y no me dejo avanzar,  me percate que éramos observados detrás de una cortina.

Me di cuenta que  esa relación no tenia futuro y deje de a poco de buscarla, un día me busco en la oficina y me comunico que teníamos que hablar, conversamos  a la hora del almuerzo en el parque Matamula, y entre sollozos me dijo que era una mujer decente, y entendida que nuestra relación era muy seria y no podía alejarme así no más, ella que se había hecho tantas ilusiones, en el noviazgo  quería que vayamos  a la misa por sus padres fallecidos, le dije que no éramos niños y que yo quería acostarme con ella y hacerle el amor. 
  Me dio una cachetada –que te has creído -  me increpo indignada no  soy una cualquiera una tipa de esas.
- soy una señorita para que te lo sepas- me lo silabeo.
 Se paró se alejó  con unos pasos breves y rápidos. Mejor así pensé ,se acabó.

Pasaron los días y cuando me cruzaba con las hermanas no me saludaban, iban del brazo con sus hábitos morados, recuerdo.

Paso el tiempo y las veía, juntas tomando lonche, te y pastelillos  en la cafetería del hospital siempre a  las cinco en punto , mujeres de costumbres , me percate que sus maquillajes eran de otros tiempos Anna así era su nombre, con dos nn, copiaba a la miss mundo peruana de los 68 , su rímel termina en un colita las pestañas largas  y los labios pintados con discreción en forma de corazón, las dos peinadas con laca, y con una onda en la nuca, cola de gato creo que se le decía, eran como personajes de hace dos décadas, se había quedado colgadas en los finales de los sesenta.

En cierta ocasión coincidimos en una fiesta  de unos amigos comunes, nos saludamos cordialmente , parecía que habían dado por olvidado  nuestro noviazgo, lo que me pareció bien, saque a bailar a Patricia y lo hacía como en los sesenta con pasos de los llamados a go go moviendo las manos al ritmo de unos saltitos muy adolescentes, pucha la de que me libre pensé, estas chicas viven en el pasado, además usaban una colonia que también me recordaba a la que usaba mi tía cuando era niño creo que se llamaba Drowa.

Me pidieron las acompañara a su casa, eran cerca de las diez de la noche, habían tomado unas copitas y estaban alegronas, salieron con sus abrigos de cuero argentino de una moda pasada  que olían a humedad y naftalina. Caminamos, la casa no estaba muy lejos, conversando cosas triviales, cuando llegamos, Anna entro y se despidió  ,  me disponía a retirarme y Patricita, me dijo que lamentaba mucho, lo de nuestra última conversación, que la había sorprendido ingratamente  porque, ellas así me lo recalco subrayado, ellas, eran unas señoritas de  sólida formación cristiana y creía que debían llegar vírgenes  al matrimonio. Y que podíamos retomar el noviazgo bajo esa premisa y poniendo fecha para  la boda.

 Yo también estaba con mis tragos , mantuve la seriedad del caso, total yo ya tenía casi cincuenta  y no estaba para cojudeces ,  le dije con la seriedad que ameritaba   que le agradecía la confianza pero había entrado a una congregación laica y había hecho votos de castidad me  despedí ceremoniosamente   alejándome dignamente. Me fui cagando de risa, por la cara que puso, supe que nunca más conversaríamos.

Paso el tiempo y envejecíamos sin percatarnos, el día a día hace que el paso del tiempo sea lento, las arrugas aparecen de a poco y se hacen parte del escenario que no vemos. Hasta que alguien de lejos de otros tiempos y nos ve gordos pelados arrugados.

Un día   las hermanas decidieron jubilarse ,tan mayores no eran , Patricia la mayor había entrado a trabajar primero  y por una ley especial trabajaba treinta años y le consideraban cinco de formación profesional  ,  se pudo retirar con el sueldo completo ,estaba por   los cincuenta  guapa y sin pareja.

Al poco tiempo Anna que no pertenecía a esa ley  tenía que trabajar hasta los sesenta y cinco  para poder cobrar su pensión del estado,  decidió que no esperaría, la suerte la acompaño porque reorganizaron la institución y ofrecieron quince sueldos a los que se retiraran de otra forma les tomarían un examen, si aprobaban en buena hora, pero sino serian despedidos, aprovecho y se fue.

Igual siguieron viniendo al hospital a la cinco a tomar lonche, con el uniforme ya viejito con las siglas antiguas de color  naranja del instituto. Con su peinado de épocas anteriores y modales de colegio de monjas, la servilleta apenas tocaba las comisuras de la boca, de vez en cuando nos  veíamos allí,  yo iba por un café, y me saludaban  con la mano con un movimiento efusivo y sonriente.  Estaban allí más de una hora, esperando que el tiempo avance para llegar a su casa  al anochecer.

 ¿Que pasara cuando una de ellas no este? me preguntaba, eran tan unidas que no se las concebía cada una por distintos caminos, eran una unidad, tenían especial predilección por el hospital donde venían con frecuencia  solían conversar con ex compañeros, que no tenían mucho tiempo para ellas, y los diálogos eran breves llenos buenos deseos. Preguntaban por los chicos, pero habían crecido y ya tenían treinta  años ellas seguían recordándolos niños. Lo cierto es que ellas tenían tiempo, pero los que trabajaban no, al principio se paraban a conversar pero al extenderse la conversación sobre tiempos idos, el personal las cortaban para seguir con sus labores, después las comenzaron a rehuir y las saludaban de lejos, mientras seguían su camino, pero ellas no se daban por enteradas, y cuando podían capturaban a algún o alguna despistada y la sentaban para que las escuchen.

Paso un tiempo y dejaron de venir, la gente no se percató, el hospital es un monstruo que se traga a sus hijos, mueren, se jubilan se van y a los pocos días nadie se acuerda de ellos, la vida continua con sus trajines diarios, ni el más encumbrado doctor, ni el ultimo jardinero son recordados una vez que se van, desaparecen de la memoria colectiva, de vez en cuando en alguna ceremonia o en algún  bar entre botellas reaparece su recuerdo como un fantasma.

Me entere que Anna había enfermado gravemente y no podía movilizarse pero estaba en recuperación, pero su pronóstico era malo, seguía un tratamiento y cada mes tenía que venir al hospital a internarse por unos días.

Se reestableció medianamente, los años se le habían venido encima,  tenía dificultad para caminar  llevaba  puesto un pañuelo en la cabeza, conversamos  me contó sobre  su enfermedad pero que ya estaba bastante bien. Lo que no se notaba, había bajado de peso los ojos hundidos, una palidez cerosa contradecían su optimismo. Tomamos té con bizcotelas  nos despedimos, me invitaron a su casa  les dije que las visitaría.

 Poco tiempo después  supe que Anna había fallecido, fui a su casa a darle el pésame a Patricia,  estaba de luto  y la sala con los cuadros tapados. Conversamos me refirió  la enfermedad de la hermana con detalles mientras lagrimas se deslizaban por sus mejillas.

–tomamos te - me ofreció. Entro a a la cocina y regreso con una bandeja con tres tazas. Sirvió de una tetera de porcelana en las tres tazas,    tome la mía  y agrego  azúcar en las otras dos tazas, ,  seguimos conversando , yo observaba  con curiosidad el comportamiento de Patricia, cada cierto tiempo volteaba como viendo a alguien  a su lado , además de un ligero tic nervioso que la  hacía mover los ojos ,me despedí   y al salir escuche a  Patricia hablando  con alguien .

Pasaron meses yun Domingo mañana vi a Patricia en un supermercado llevaba un carrito con algunos productos, yo iba un poco  atrás y me disponía a acercarme para saludarla, pero en eso me di cuenta que hablaba sola y se dirigía a su hermana – ¿llevamos fideos Annita?  Ya,  canutos como a ti te gustan, contesto  cogió dos bolsas mientras seguía su recorrido, conversando sola.

No volví a saber de ella hasta un domingo que le leí un obituario en el Comercio, invitando a la misa por el descanso eterno de  las hermanas  Sambuccetti, los familiares invitaban, ¿Quién habría puesto el aviso? No les había conocido familiares cercanos, pase por la casa vacía deteriorada, al irme me pareció ver una cortina que se movía  desde una ventana del segundo  piso.

Jesús María. Mesocrático





lunes, 10 de septiembre de 2018

AL FIN Y AL CABO


                     

                     TODO TIENE SU FINAL


Salsa.

Te lo juro que
Todo tiene su final
Echale pa delante mamá
Resultado de imagen para viejo burocrataWillie Colon, Héctor Lavoe.






Era su ultimo día de trabajo, también su cumpleaños numero setenta. hace mucho había dejado de celebrarlo, su mujer lo saludaba y solo salían a comer a la calle.

Lo retirarían del sistema de registro de asistencia recordó la vieja tarjeta de la maquina de registros, tarjeta que no debía perder, hoy bastaba con poner la cara en la pantalla de reconocimiento facial y listo, quedaba registrada la entrada o la salida.

Habían pasado 38 años desde que llego al ministerio, aprovechando que el gobierno de la época, abrió las puertas a los compañeros del partido  que habían participado en la campaña electoral, en realidad el no era estrictamente militante ni compañero, pero el olfato no le fallo cuando vio quien iba a ganar y un primo suyo lo invito al partido. Trabajaba en lo que se le presentaba era un cachuelero, desde que salio del colegio se puso a trabajar, pero ya casado con un niño que mantener, se le abrió el cielo al conseguir trabajo estable, fácil, quince sueldos al año, vacaciones,  sindicato  huelgas incluidas.

La noche anterior no pudo dormir bien, el sueño demoro en llegar, pensando mil cosas, entre otras, que iba a hacer jubilado, como serian los tramites para obtener la pensión , si le alcanzaría; su esposa dormía plácidamente y le quitaba las frazadas, ella se había jubilado un par de años atrás, tuvo sueños confusos que lo sobresaltaban ,Se mezclaban la infancia en el barrio, veía a su padre joven ,riñéndolo por no estudiar, calles oscuras, llenas de gente.

Se levanto mas temprano que de costumbre, la ciudad todavía en penumbra con la llovizna tan limeña , y la corneta lejana de un panadero, prendió la radio en la estación de siempre, la que lo  despertaba para ir a trabajar  , ya no estaban las voces que durante tanto tiempo escucho , la ultima la de Don Raul, paciensuda, grave,  se había retirado. No se acostumbraba a las nuevas voces, pero la fuerza de las rutinas lo hacia mantener los ritos matutinos.

Fue al baño, se  puso la espuma para afeitar y vio su rostro  arrugado, el pelo cano y bien cortado, eso era ,nunca había dejado de afeitarse  temprano ,ni se había dejado crecer el pelo se lo cortaba el mismo peluquero del barrio , el sábado después de cobrar el sueldo. no había sido buen mozo de joven  así que de viejo menos pensó, pero siempre limpio y bien vestido sobrio tradicional zapatos negros  lustrados ,pantalón de vestir camisas clásicas con bibibdi, hizo muecas y sonrió.

  Tomo su desayuno rápido un café con mucha azúcar y dos panes con mantequilla.

Tomo su micro la 79,  no había mucha gente logro ir sentado, pensando  como seria ese ultimo día , ya no tenia ningún trabajo pendiente , mas de un mes que solo hacia trabajos simples de rutina, nada importante, archivo de  expedientes sin resolver, dejar cuadrado el pequeño almacén de material de escritorio , llevar traer documentos ya casi no lo tomaban en cuenta, además nunca había tenido un cargo de importancia, auxiliar técnico IV.

Llego temprano la gente recién empezaba a ingresar, somnolienta, aprovecho para lustrse los zapatos y tomar un vaso de quinua y pan con camote. Demoro a propósito  mirando los titulares de los diarios y  paso el registro de asistencia a las ocho y ocho.

Entro saludo sin entusiasmo , salvo a su compadre Arquiñigo, habían entrado a trabajar juntos ,era un poco mas joven que el y había estudiado administración , tenia un puesto de mas nivel,también le faltaba poco para irse.

Hizo sus tareas de rutina y se fue a dar un par de vueltas sin rumbo por el edificio, en realidad nadie lo extrañaría no era necesario, sino hubiera venido , no hubiera pasado nada, ni se habrían dado cuenta, el lo sabia  se había resignado,no se hacia problemas.

Regreso al pequeño escritorio que tenia , estaba vació , solo su taza vieja para tomar café  . la saco y la puso en una bolsa y se la dio al chico  de limpieza.

Poco antes de salir a almorzar el jefe de la oficina   los reunió   sacaron una torta, bocaditos de la panadería del frente, una inca kola , le hicieron un homenaje de despedida con la palabras de siempre, no es mas que un hasta luego , esta siempre será tu casa, fue un ejemplo de puntualidad, no había mucho que decir sobre su vida laboral, lo mas saltante había sido hace muchos años, que por un convenio del sindicato lo habían mandado a capacitarse a México con otros veinte trabajadores  , por lo que logro ascender a auxiliar técnico IV.

 Le entregaron una placa por  por su destacada labor  le tomaron unas fotos , la gente apurada por irse a almorzar aplaudió y salieron  ,le dieron unas palmaditas en el hombro, muchos eran recién llegados ni sabia sus nombres.

 Puso la placa en una bolsa de plástico  la metió en un cajón vació del escritorio y salio a almorzar al restaurante de siempre al menú de siempre. Converso con los de la mesa compartida de   las noticias del día del fútbol de fin de semana , era jueves.

Termino pago y regreso a terminar el turno de la tarde. Se limpio los dientes con un escarba dientes con esmero mientras caminaba.

Estaba por entrar , cuando súbitamente, se detuvo y se pregunto ¿Qué chucha he hecho de mi vida? Y encima tengo que regresar a terminar el día, se van pa la mierda , se dio media vuelta compro un periódico, vio la programación de los  cines uno en el centro daban una película peruana sobre la corrupción de los noventa.

Se fue sin pensarlo , sin despedirse  , sin arrepentirse , sin extrañar,sin culpa, entro a la sala con su pop corn y su Pepsila sala casi vacía lo hizo sentir mejor aun, disfruto la película ,  cuando salio, empezaba a oscurecer,otra vez la llovizna recordó cuando de chico se escapaba del colegio y se metía al cine.

En el trabajo nadie se percato de su ausencia, hasta el final que la secretaria, lo busco para entregarle su carta de cese; No lo encontró alzo los hombros y se regreso, ya vendrá a recogerlo pensó.

De regreso a casa compro pan con jamonada, entro a la  quinta,
 - hola vieja – saludo a su mujer.dejando el pan en la mesa del comedor.
- ¿que tal tu ultimo día?- pregunto la señora  desde la cocina.
-Como todos los días- contesto mientras prendía el televisor.


       
 


miércoles, 5 de septiembre de 2018

GATOS


                                                                           GaTOS 


chi.




erase un gato plástico 
Entre gente simple 
de esas que van por allí
(tomado de BLdes)



Imagen relacionada
https://youtu.be/cqZc7ZQURMs 







La gata de la casa se llama Chi, aunque su verdadero nombre es Katy Chi, tiene cinco años y la traje a la casa una mañana que regresaba del gimnasio, vi un aviso en una puerta, toque y me preguntaron ¿hembrita o machito? hembrita conteste automáticamente.

Me entregaron un animalito de pocas semanas de nacida, flaca y gritona , mi experiencia con felinos era nula, y a todos les sorprendió porque en general no me gusta criar animales.

La envolví en mi toalla, y a pesar de ello sus uñas filosas rasguñaron la piel de mi brazo.me subí a un taxi para  llegar rápido, en casa se alegraron. 


Ronronea la noche 
Tibia de verano,
El gato soñoliento , sonríe.   




Un largo aprendizaje fue convivir con Chi ,  una sobrina nos dio lecciones  básicas, una caja con arena para sus necesidades, y alimento ,nos sugirió  unas galletas, además de llevarla al veterinario y sus vacuna. Una patita delantera era blanco como si fuera con un guante, atigrada de colores plomo marrón su pelaje.


Una sombra ágil
 Leve silenciosa
por la noche vacía.


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Los gatos se parecen a la gente que los cria, o los humanos que los crian se van pareciendo a sus gatos, no lo se pero que hay un intercambio de caracteres y un parecerse, es que va pasando y es real.
Animales de costumbres y hace que los que vivimos con ellos las sigamos , cosas como cambiarle la arena  cada cierto tiempo sino la cambias por arena limpia, se mea en un mueble  como para que no te olvides. Su alimento una vez que adopta unO , no lo cambia , si intentas ponerle otro simplemente no lo come.

Sentada en la noche

Brillan dos chispas 
En el pasillo.Imagen relacionada



ChI se acostumbro a unas galletas con sabor a pescado , que no la cambia ni por el alimento húmedo , ni pescado crudo , ni en conserva  menos carne , puede quedarse en la mesa  pero no lo toca ni los huele. Come en las madrugadas,  a medio dia y por la tarde antes que oscurezca.es frugal no es una gata golosa ni esta gorda de vez en cuando come lechuga, o las hojas frescas de flores.

Es curioso como  toma agua, cuando tiene sed, avisa y se para en la puerta del baño y tiene un maullido especial como de suplica. Prendemos la luz y salta al lavabo espera que abramos el caño y toma pero con su patita que la moja, y de allí bebe, sino toma de un vasito  igual mete su patita la moja y se la lleva a la boca repetidas veces.

Mueve la cola 
Algo nos dice
Desde su silencio.



 Tengo que cerrar la puerta de mi dormitorio, porque sino me despierta como a las tres de la mañana para que le de agua, sino despierto me mete unos golpes con la cabeza,     va subiendo la intensidad de su solicitud, una mordida leve en el brazo es mas que suficiente para que me levante,  medio dormido llego  al baño  para abrirle le caño , la vaina es que a mi nomas es al que le pide agua a esa hora, ni mi esposa ni  a mi hijo  ni a los nietos.

Pero el alimento no me lo pide a mi, sino a mi hijo ,  no duerme conmigo,  ni con el, sino con mi nieta se pone a los pies de la cama y allí vela su sueño, si alguien enferma y guarda  cama , cHi acompaña  a los pies del enfermo. asigna   a cada uno sus tareas y obligaciones .


A cada quien le reserva un cariño, pero el que le da a mi hijo es especial, le da lengüetasos en la nariz y cuando llega salta a sus brazos, cuando no esta , llora, y sus maullidos son como lamentos. A mi se me acurruca en el pecho cuando estoy echado  , a mi esposa le saca el agua de su vaso por las noches, a mi nieto no le hace caso y mi nieta  no le perdona que de cachorrita le haya cortado los bigotes. Claro era muy niña , pero además le puso un spray desinfectante, así que de vez en cuando cuando ella se acerca , un zarpazo y un rasguño la obligan a mantener distancia.

 https://youtu.be/fcjR93Jin4Y simon cat






La otra noche Alejo  nieto se quedo dormido en la cama de su hermana , lo despertó de un leve mordisco y se tuvo que ir a dormir a su cama, como poniendo disciplina y orden.

En la feria del libro y en librerías he visto mas de un libro sobre gatos , leí un articulo de gente famosa y sus gatos  de Jaime Bedoya en el Comercio , como se convirtieron en los animales favoritos de la cultura popular, cuenta algo así como un perro recibe comida de un tipo y piensa ah, es un dios,  lo mismo ocurre con un gato y el gato dice, ah soy un dios.

Grácil el paso egipcio 
Algodón ,lino blanco
Sin huellas ,sin ruido 
sin dueño.



Hay una diosa gato en el antiguo Egipto , BAstet que era protectora de los hogares,  Bedoya hace referencia a un libro El tigre en la casa (Mitin 2018) de  van Vechten  sobre gatos y escritores, una larga lista. PoE, Hemingway, ArgUedas, Borges y muchos mas.




Hay como una especie de gatofilia,  que desconocía, libros , esculturas en madera, pinturas, y todo un mundo de cosas para gatos, incluso un programa en la televisión de un psicólogo de gatos.

Películas Un gato sobre el tejado caliente, los Aristogatos,  comics Don gato y su pandilla, FeliX , Tom , canciones un gato en la oscuridad, el año del gato, cuentos eL Gato con bOtas, liBros EL gato negro  Poe ,famosos Gaturro, Garfiel .karim,el gato de Alicia en el país  de las mAravillas.


y este es uno de mis dialogo favoritos , es una sonrisa de gato invisible , de un gato filosofo

alicia en el país de las maravillas



De alguna forma creo que nos han domesticado. 


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miau
Cartel publicitario para Le chat noir,  de Steinlein.






















































 







mis guardias nocturnas.

 GUARDIAS NOCTURNAS Ha pasado muchos meses que no voy a trabajar al hospital, primero fue por descansos médicos por un problema oncológico, ...