UN AMIGO TROTSKISTA Y EL DÍA QUE FUI INVASOR

                                                 UN AMIGO TROTSKISTA Y EL DÍA QUE FUI INVASOR

Corría el año 1985, había regresado Chosica en el 83 de Ica  ya como profesional farmacéutico, la Izquierda Unida con Frejolito  Barrantes se convirtió en el primer y único alcalde de capital socialista de América.

La alcaldía de Chosica están dirigida por la IU con Roca como alcalde los amigos estaban de regidores, yo era parte del entorno más cercano era militante de la UDP  fracción integrante de la IU.

En ese ambiente se acercaba mucha gente a pedir cosas yo observaba, toda vez que no tenía ningún cargo pero si acceso al despacho municipal íbamos por los pueblos jóvenes ,tratando de ver los problemas que la municipalidad pudiera solucionar, además que íbamos captando gente para la UDP muchos pertenecíamos a la organización que dirigía Javier Diez Canseco, pero también habían gente del PC moscovita y del  pro chino Patria Roja, disputándonos la hegemonía y las bases, la municipalidad era un medio para captar militantes.

En una reunión privada  de confraternidad en Chaclacayo  un almuerzo con más precisión a media semana y a puerta cerrada fueron llegando los conocidos y algunos invitados,  en ese tiempo como ahora Alfredo Bryce Echenique era mi autor favorito junto a García   me había dejado los mostachos y el pelo como él y me había comprado unos lentes igualitos a los que usaba el escritor, llego un tipo que se sentó a mi costado  y las cervezas circularon con alegría de pronto el tipo  que tenía unas serie de muecas y gesticulaba y movia las manos como Marco Aurelio Denegri  al hablar con una voz rasposa resbalo y cayó  de espaldas, lo ayudábamos a levantarse y me dijo -Te pareces a Brice –allí comenzó una conversación sobre literatura , el tipo era un conocedor y había leído todo lo que yo y más. – debes leer a Carpentier me sugirió. La conversación regada con abundante cerveza nos puso locuaces se presentó como José Luis B  comenzó una intensa amistad que terminaría con fuego.

José Luis era delgado ,cegatón usaba uno lentes de muy alta graduación que sin ellos era un murciélago, canoso muy entretenido muy pero muy culto ,rara avis en el entorno, era de  movimientos desarticulados,  gesticulaba con las manos las que movía rapidísimo, acompañando a su discurso una serie de gestos y muecas para dar énfasis a sus ideas, y tenía todo el tiempo para conversar amenamente, podía pasar de películas al teatro de allí a libros de Althusser a Sartre, de psicoanálisis lacaniano al freudiano, polemizar solo y contra el mismo de la poesía de Vallejo y Eguren pero él se quedaba con Martín Adán como identificación de vida ,pasaba de la  pintura de Dalí a Picasso opinaba que Dalí de tal época si de la otra no,   Miro no le gustaba Velázquez si, era hincha de Carpentier por innovador, yo lo escuchaba algo opinaba pero el profundizaba al máximo, no es por nada pero era una enciclopedia.

Vivía en Tarazona cerca a la bajada a la Cantuta , era abogado pero al parecer tenía muchas horas libres, estaba dentro de la izquierda en posicion minoria lucida , sin agrupacion , tenia gran claridad del acontecer político y proponía prematuramente convertir el frente en partido, no era muy escuchado porque la gente estaba mas metida en asuntos burocráticos municipales donde no habia experiencia y mantener hegemonias al interior del IU. En una conversación polémica hablo de la cuarta internacional de la revolución permanente  del partido de los trabajadores era TROSKISTA, Eran mal vistos los troskos por los Leninistas Stalinistas pro todo poderosa URSS  dirigida por PCUS  partido comunista de la Union Soviética, adalid del socialismo en el mundo bipolar contra el imperialismo Yanqui.

 A la mayoría de nosotros no nos habían contado todo lo que hizo Padrecito Stalin ni la siberia ni los campos de concentración ni los millones de muertos en nombre de la patria nueva hay un libro actual con otra visión a la oficial antes de la caída del muro de Berlin. LA OCTAVA VIDA de Nino Haratischwilli alfaguara. una excelente  película EL PUENTE DE LOS ESPÍAS. En fin ignorancia falta de libros pero defendíamos el Socialismo real, con sus triunfos en las olimpiadas su arsenal nuclear defendiendo a Cuba su lucha por la conquista del espacio su internacionalismo proletario y todo lo demás. Todo se iría al diablo. Con la Perestroika y la caída del muro de Berlín.

Bueno además de simpático culto raro era trotskista en alguna oportunidad en mi casa con un amigo del partido comunista que dirigía ese anciano cara de buena gente que era Don Jorge del Prado. Comenzó una discusión al pie de una botella de ron y le metió una tanda argumental que incluía citas pies de página, la página, la obra completa de Trotsky y cualquier parte de su bibliografía que se la sabía de memoria y las actas de la cuarta internacional y las polémicas y todo lo demás, que mi amigo no le quedo otro argumento que meterle un puñetazo dando por terminada la polémica.

Muchos años después entendiendo que José Luis era un genio que bordeaba la locura era lo que hoy denominamos un Asperger.

Lecturas y aficiones comunes hacia que nos buscaramos , y nos tomáramos unas cervezas, solíamos ir a sentarnos en  esa hermosa  bodega de Don Nino Guaynazzo que el tiempo se llevó , a beber sin prisa ni pausa en largas conversaciones en esa bancas altas y apoyados en el mármol antiguo.

Permítanme una digresión, que me viene de ese tiempo, el crecimiento urbano era desbocado caótico, y la municipalidad de Lima organizo una toma de tierras ,al estilo Villa El Salvador invasión ,que se iba a dar de todas manera, HUAYCAN un fundo de la familia Poppe en la carretera central viniendo de Lima a mano derecha entes de entrar a Chaclacayo, tenían una linda plantación de rosedales antes de entrar a los sembradíos  eran un espacio erótico para la gente de Chaclacayo que iban en sus carros.

 Nos avisaron un día a los del cogollo de la municipalidad teníamos un cupo de cuatro manzanas, si queríamos un lote la noche siguiente teníamos que estar a las nueve de la noche en la puerta de la municipalidad en el parque además de donde yo era vecino , no se me ocurrió mejor idea que pasarle la voz a mi querido amigo Kike Morote, quien acepto , tuvimos que dar veinte soles para la estera correspondiente. Cerca de media noche  partimos en un camión, llegamos la zona estaba acordonada por policías y una guardia de invasores con palos. Teníamos cada uno un salvoconducto éramos miles muchos ya habían llegado, los altoparlantes de diferentes zonas se escuchaban en la oscuridad dando las indicaciones y ordenando a la multitud alumbrados por antorchas de los diferentes lugares.

Entramos raudamente y una señora, la delegada nos ubicó en la manzana correspondiente y nos dio los lotes,-márquenlos con piedra- ordeno aunque ya estaba lotizado con cal. Entre piedras acomodamos nuestra frazada, ni bien estábamos ubicándonos comenzaron a sonar alarmas, debo mencionar que Enrique y yo éramos de los pocos con la piel más clara, lo que de por si levantaba ciertas miradas incomodas.

¡Vienen por Horacio Zevallos ¡ gritaban , a defender nuestro terreno, de pronto sentimos explosiones y balazos ,nos vimos dentro de una turba corriendo hacia los cerros desde donde veíamos muchas antorchas viniendo hacia nosotros. Entre gritos y estruendos alguien nos alcanzó unos palos de metro y medio más o menos, corríamos gritando hacia los cerros sin saber con quienes estábamos ni a quien nos enfrentábamos ni porque  - no te me separes Quique- le grite pero había desaparecido , me pare a buscarlo y lo vi que se recuperaba de una caida entre el desnivelado suelo -no paso  nada -dijo mientras salia cojeando  . A los pocos minutos se desactivo la alarma por los parlantes, regresamos y nos ubicaron en nuestro lote gracias a la contraseña que era Roca Chosica, de otro modo no hubiéramos podido retornar en la oscuridad.

Esa noche fría de invierno la pasamos allí, amaneció con neblina en un mar de esteras, nos agrupamos nos dieron las indicaciones, que debían traernos alimentos que teníamos dos horas para regresar, en ese momento decidí que  acababa mi vida de invasor, le dije a Quique además había que hacer trabajo comunal los Domingos , el permaneció cuatro días y retorno con bronquitis dando por finalizado su aventura.

Regresando a la historia de José Luis, nuestras largas conversaciones regadas con  cerveza o ron eran cada vez mas seguidas, era un tipo encantador sabia francés y  la gente a los que  presentaba porque era nuevo en Chosica, lo invitaban a contar historias. Conocía medio mundo cultural del centro de Lima, era divorciado, y provenía de una familia de clase media alta había estudiado los Carmelitas en

La Católica y San marcos, sociología en la primera y derecho en la segunda en simultaneo.

Nuestra cercana amistad se terminó abruptamente una noche  de tragos y un largo peregrinar por bares chosicanos, recuerdo en una conversación densa, media depre por las calles vacías y oscuras , como era tarde se quedó a dormir en mi casa.

Era el segundo piso de la farmacia de mi tío, Chosica tiene desniveles la farmacia estaba en la parte comercial Chosica baja al nivel del rio  se accedía a la zona comercial por tres  amplias escaleras desde Chosica alta  una  desde la zona residencial estaba mi casa en Chosica alta y la farmacia en la parte baja por eso tenía acceso a la calle. Una casa antigua de quincha y madera, la sala estaba a la entrada y al costado de la puerta principal una habitación con un colchón en el suelo, el dormitorio con mi esposa y mi hija estaba adentro. Nos fuimos a dormir cuando al rato nos tocan la puerta violentamente.

 Mi esposa  me despierta  salimos  vimos la casa llena de humo, que salía del cuarto donde dormía José Luis, abrimos la puerta de la calle y un borrachín  vio que salía humo del cuarto por una ventana rota y nos tocó muy oportunamente la puerta. En este momento que escribo, pienso que fue otro ángel que me volvió a salvar la vida.

Mi esposa corrió por la bebe y  abrí la puerta del cuarto donde estaba  mi amigo  dormido asfixiado  lo saque, aturdido y lo tire a la calle, regrese volando, el colchón se había prendido por un pucho de cigarro que mi huésped olvido apagar, el fuego había cobrado vida y una llama de un metro se levantaba amenazadora. En el primer piso debajo del cuarto con el colchón prendido debo mencionar que estaba la farmacia y mas precisamente el depósito de papel higiénico  y al lado dos cilindros de alcohol, yo trabajaba allí, el colchón en el suelo estaba sobre un tapizan sintético que cubría un piso de madera, de expandirse el incendio hubiera resultado un incendio de gran magnitud.

Atine a volver a entrar y sacar le colchón prendido el que tire a la calle entre el borrachito y mi señora lo apagaron. El amigo que nos salvó la vida nos pidió una propina que siguió pidiendo cada vez que pasaba a comprar en la licorería del costado.

José Luis aturdido repetía con gestos de una gran pena te pagare tu colchón,  lo que por cierto no hizo. Se me quemaron las dos palmas de las manos estaban negras y en algunos sitios roja en carne viva, me di cuenta después que se apagó el colchón, llego mi padre médico  y yo temblaba de dolor  como escalofríos me lavo me puso gasa parafinada y esa noche me puso morfina, estuve como un mes sin poder utilizarlas, perdí de vista a mi amigo trotskista creo  fue lo mejor.

Años después trabajando en la farmacia del hospital me busco con un amigo  para que lo conectara con  los hospitales de campaña tenía un evento con una ONG, me dijo que me buscaría. A la semana vino su amigo a preguntarme por el, había desaparecido. Me busco después  un par de veces pero le dije que andaba ocupado, era de esas amistades peligrosas estaba metido en dos cosas  más peligrosas que el alcohol y el tabaco .el mismo era una revolución permanente.