miércoles, 8 de mayo de 2019

cuando fui MARISTA.


                           

                                                 COLEGIO CHAMPAGNAT   1968 1969

VJMJ

Con el aprecio a la primera  promoción  del
 Champagnat Chosica. 

el tiempo y la memoria
borronean nombres y rostros.

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asi comenzamos en el 68 .


Mi primaria y primero de media lo  estudie en el colegio de aplicación de la UNE la Cantuta, una serie de hechos desafortunados vinculados a mi conducta, en la que aparecía jalado y ciertas malas amistades así consideradas por mi padre hizo que me retiraran del colegio de mi infancia el año 1967, el Santa Rosa no era opción, pero justo ese año inauguraron el colegio Marista MARCELINO CHAMPAGNAT en la villa del mismo nombre en Santa Eulalia.


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Comenzaban de cuarto de primaria a segundo de secundaria, justo mi hermano Jorge entraba a cuarto y yo a segundo.  Nos matricularon era un lugar precioso tranquilo las aulas recién construida, nosotros las inauguramos, una hermosa y bien cuidada cancha de fútbol, rodeada de árboles pinos eucaliptus, dos canchitas de tierra y el recreo 10 pelotas de cuero. El cielo.

Rodeado de chacras de paltos, más arriba, la casa de los hermanos maristas  nuestros profesores, una capilla con hermosos vitrales, un auditorio teatro una biblioteca inmensa todo nuevo, rodeado de silencio y el viento silbando entre los árboles y las chacras.

Llegábamos en los viejos cacharrientos buses amarillos y rojos destartalados que cubrían la ruta Ricardo Palma Chosica  la Cantuta Tarazona Chosica el Palomar  Ricardo Palma, el cacharrito nos dejaba a media cuadra de la estación de piscicultura camino oficial nosotros cortábamos por unas chacras polvorientas.

El primer día de colegio

Llegamos tímidos y no pusieron en filas en un patio de tierra,  por salones de pronto caras conocidas de la cantuta Hugo Sedano  Manuel Giraldo   los Pizarro  Luchito Hinotroza, esas eran las malas juntas que  mi padre quería evitar pero a Hugo lo habían cambiado por los mismos motivos  para evitar las malas junta entre las que estaba yo,  por incidentes mal comprendidos  que desbordaron nuestro control , los abrazos y risas estaban  amigos del barrio Cesar Espejo sus hermanos  y otros que conocimos también con problemitas de disciplinas y conducta de otros colegios Como el Wilson ilustre por sus palomillas, del Pablo Patrón  Samaniego  Villarroel Montesinos Huico Hernán  otros de Matucana,  Guevara  otros de Nicolás de Piérola  mi compadre  Ampuero a José Luis Velásquez ah y los de Ricardo Palma también de la Perla   los Arredondo, además gente estudiosa otros como la vieja, el pucho, Chiang fino dominador de pelota.

Los salones nuevos, nosotros los inauguramos, carpetas bipersonales me sentaba con  Cesar Espejo radicado en España, además como vivíamos cerca, estudiábamos juntos, nos escapábamos al cine  yo decía que iba a su casa y el que iba a la mía, no podré olvidar, una noche fuimos a ver Drácula, y hubo un fuerte temblor a mitad de función y tuvimos que salir disparados cada uno a su casa. Tantas anécdotas, nos subimos todos los cerros de Chosica, buscando el mitológico Fuerte Santiago, de la guerra del Pacifico.

En el Champagnat estuve en la escolta, para los desfiles sino recuerdo  mal, estaban Quichi Succar, Ortiz de Villate, Hernán Núñez entre otros que la memoria se los guarda. Fui presidente de una entidad directiva de los alumnos con  Jorge Coqui Ohara era el vicepresidente no duramos mucho.  éramos del grado más alto del colegio y siempre lo seriamos  crecíamos siendo los mayores  año a año aumentaba, no tuvimos un  salón encima.

 Éramos la base de la selección de fútbol. El deporte era uno de los pilares del colegio,  llegamos a juntar un equipo que nos fue muy bien no solo en Chosica con el Pablo Patrón el colegio nacional que tenían varias secciones además de excelentes jugadores animadores de los campeonatos interescolares semillero de los clubs chosicanos, algunos llegaron a jugar en la primera profesional nosotros solo un salón de treinta alumnos, con el Santa Rosa de la congregación Agustina y con mi ex colegio La Cantuta. La gira que hacíamos para ir a Lima a jugar con los otros colegios maristas, del  Callao Miraflores, otro más pero la niebla del tiempo lo borronea, pero a todos los ganábamos por goleada si mal no recuerdo. Nuestra vida era una pelota y un arco.

A ver si me acuerdo en el arco Hernán Larguirucho  también Romel Menacho   la defensa kichi, los hermanos Arredondo que pateaban lo que sea movía pierna o pelota el huanuqueño y narigón Cardich , Angulo, en la volante mi comparito Ampuero  Coqui y yo, que juraba jugaba  como Roberto Chale mas entusiasmo creo ahora con la mirada en retrospectiva, delantero José Luis  flaco y veloz Hugo Sedano pericotero amarrabola firulete puro gambeta  mismo Sotil , Jorge “huico” La Rosa, puntero fuerte gambeta y unos tiros con efectos raros, Alfredo  pata de punche  Guevara radicado en estados unidos, puntero derecho veloz y de una patada fuertísima, también alternaban Lilo Villarroel ,chueco  puntero,   recuerdo una vez jugando un burro pastaba en una esquina, y el recibe la pelota y sale disparado para la esquina donde estaba el animal que asustado le lanzo una patada que felizmente no le dio. Donald también  jugaba con una vehemencia al igual que Lube. Del salón que nos seguía había también chicos que jugaban el pajarito, el negro  Mendiola prodigioso para poner bolas de gol con el que todavía pichangueo, Telmo Milla, tantos otros con los que jugábamos todos los días todas las horas en todos los sitios. Lucho LLabres gran amigo y su hermano Ricardo. El flaco Valle, William Pizarro.

La pasamos súper bien, el señor La Rosa padre de Jorge nos llevó a jugar por los juveniles del Club Ferroviario de Chosica. Jugar en el estadio Solís García los sábados por la tarde nos hacía sentir estrellas del fútbol.

Recuerdo las tardes en el colegio comenzábamos rezando el Rosario el Ave María lo comenzaba uno por uno de nosotros en orden, había un  compañero que tenía dificultades para hablar y sufría cuando le tocaba, porque los chicos somos crueles y nos reíamos cuando se atracaba hasta que un hermano nos explicó y nos hizo comprender y nunca más nos burlábamos, un acto que me marco fue una tarde que llego un hermano marista que nos enseñaba,  con el acento español que caracterizaba a muchos, nos dijo:

-ya no os  llamareis por vuestros apellidos, sino por vuestros nombres o como queráis  que os  llamen- 

 así comenzó una terapia que nos unió mucho, llamarse en los colegios por los apellidos era una costumbre antigua, recuerdo al amigo que tartamudeaba salir y decir con claridad y sin titubeos me llamo tal, a Ramón a decir que lo llamen Monchi y hoy casi 50 años después lo seguimos llamando así, igual yo  -pretendo que me digan Chejo y hasta hoy me identifican  como tal.

Gran tiempo, recuerdo con cariño en un partido una tarde  , puedo decir en que arco fue , había pasado la media cancha y metí el centro con la esperanza que llegue al área grande rival , pero me salió un patadon, creo que el aire ayudo que se yo, la cosa es que la bola llego al arco a la esquina más lejana  entrando por el rincón de las animas ante el estupor la sorpresa de la gente , no podía créelo, yo que no podía patear un corner  porque no llegaba al área, la bola en movimiento también ayudo , lo cierto es que pasaron mucho años 10 20 y hay gente que se acuerda del gol, en especial un amigo que cada vez nos metíamos unos tragos le contaba a todos el gol del Chejo.

Estudie segundo y tercero, pero había algo que no funcionaba con la disciplina marista sus costumbres, no sé porque me condicionaron la matrícula para pasar a cuarto las explicaciones que le dieron a mi mama tampoco le gustaron. En acuerdo de familia  me escucharon que quería volver a la CANTUTA, no es que no quisiera al colegio ni a mis compañeros y amigos, pero mi formación desde primaria era muy fuerte y en el fondo siempre fui un cantuto , y creo que los hermanos maristas como educadores lo percibieron, de alguna manera vieron eso .

Me fui molesto por la forma, creía que el director me tenia aprecio ,  pero a los compañeros  siempre los seguí viendo encontrandonos  siendo grandes amigos,   lo importante lo que me emociona ,  es que  me consideraron parte de la primera promoción.

pd de acuerdo a la acogida , recogeré anécdotas  como la del instructor de ipm , de huallaringa y otras. .









2 comentarios:

  1. Excelente compadrito Chejo.Recordar es volver a vivir.felicitaciones .

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