miércoles, 1 de agosto de 2018

mudanzas





          LA PENULTIMA  MUDANZA DE LA FAMILIA ALZAL.

Donde se cuenta de los muchos cambios de domicilio de una familia con espíritu gitano.

¿que hay detras de tantos cambios, que subconciente, que genetica,  se esconden en los tantos cambios de morada? 


1980.Cuando nos casamos sin mucha economía estudiando el último año de la universidad, comenzamos la larga marcha en tantas casas.

La primera, fue por el dato de una amiga de la universidad Charo Martínez, una de sus tías, tenía un ambiente libre en la parte posterior de su casa, en Ica, barrio Manzanilla,  humilde sin pistas todavía, la casa de Carmen y Ganchito él trabaja en una imprenta encuadernador, viejo arte, el ambiente que  nos con cariño nos facilitaron era en la parte posterior de la casa pasando un pequeño jardín, con rosales y un parral que daba sombra a la entrada a nuestra casa, era un ambiente   grande con un baño, unos 70 metros cuadrados, estaba sin uso y para limpiar, el precio era de amigos, durante dos semanas lo adecuamos  , pintamos enceramos la puerta de madera la pintamos recuerdo de celeste,  y al frente tenía una caño con un lavatorio de hierro forjado.

 Allí le comenzaron los dolores de parto a Zully, fue un Junio muy frio en el que nació Mey-Ling en el hospital Regional, mi padre pediatra vino desde Lima con mamá y estuvo en el parto por cesárea, demoro en llegar la niña.

 Vivimos allí casi dos años, dos veranos en Ica. la pasamos bien Félix  alias Ganchito era el dueño de la casa , un hombre callado de costumbres sencillas,  salvo cuando se tomaba sus piscos y me buscaba  para conversar y era otro, locuaz palomilla, su mujer y sus dos hijos estaban en Lima.

De allí no vinimos a Chosica, un invierno  me regrese a mi pueblito  con mujer e hija, en un camión del  papá de los Prada, amigos de la universidad.

 Dejamos las cosas en la Victoria en la casa que había sido de la tía abuela Marina Bernuy, de allí de a poco las lleve a la casa paterna, inmenso caserón  donde nos habían preparado y acondicionado las habitaciones del fondo de la casa, reparo al escribir esto que fue otra vez detrás de la casa principal y pasando un jardín, allí estuvimos poco tiempo,  teníamos la idea de vivir solos así que gracias a una conversación de mi padre, con su hermano Michelin.

 Pasamos a vivir a la casa arriba de la Farmacia Alzamora, jirón Víctor Secada 200, donde antes había vivido mi tía Juanita su esposa Víctor y sus hijos, y anteriormente  el tío Michelin con la tía Carmen, cuando la deje mi primo Orestes vivió un tiempo allí y fue porque  después de una crecida del rio Rímac que desbordo al barrio de San Fernando donde vivía con su esposa.

En esa casa  vivimos tres años y algo más, vivimos tiempos del terrorismo , yo trabajaba en laboratorios Roche,  luego en Ciba Geigy y  en la  farmacia de mi tío ,la pasamos bien ,era una casa grande para nosotros tres, la abuelita de Zully Doña Felipa nos acompañó algunas veces por meses, Zully era su engreída.

Esa casa casi se incendia; Fue en una noche de tragos en la bodega de Don Nino, antigua de un italiano, bueno y trabajador.
Estaba con José Luis  genial, abogado trotskista, lector terrible, de una memoria tan grande como sus gestualidad gran conversador versado y vamos  más que aficionado al trago.

Llegamos a casa y él se quedó a dormir y se olvidó el cigarro que agarro el colchón, felizmente una luna rota  permitió la salida de humo y otro borrachín que pasaba nos golpeó la puerta, para avisarnos y nos permitió salvarnos ,José Luis casi ahogado , el colchón prendido que saque a la calle donde lo apagamos  quedando con las manos quemadas, si se hubiera extendido el fuego no hubiéramos podido salir el incendio era a la entrada a la casa, y debajo estaba el almacén de alcohol    de la farmacia y aledaño el de papel higiénico.   Gracias a Dios, el único herido fui yo con las manos quemadas  más de un mes sin poder usarlas.

En Enero del año 1986, comencé a trabajar al Hospital Rebagliati, nos mudarnos a Jesús María, a seis cuadras de hospital y  cerca del hospital del niño donde todavía trabaja Zully.

Húsares de Junín, cuadra ocho, un departamento en  el tercer piso donde había vivido una colega de Ica y su esposo médico .Gracias  al dato de la comadre Ñaña Yem Heng, logramos conversar con la dueña una anciana , la Srta. Figueroa. Como era viejita nos comprometimos a llevarle el pago del alquiler a su departamento en la avenida Arequipa.

Allí nos mudamos también en invierno, primera vez que viviríamos en Lima, con la humedad y el frio, los ruidos a lo que no estábamos acostumbrados. Allí vino Sergio Manuel,  nació en el hospital Rebagliati,  mi padre Sergio tambien estuvo en el parto.

Allí pasamos  la parte más brava de los terrorismos los apagones, los atentados, escuchamos el de Tarata, y muchos más, el atentado del canal dos a tres cuadras. Vivimos la hiper inflación y la parada en seco cuando el sueldo de un día a otro solo servía para 20 panes.
Un buen día  decidimos entrar al mundo de los negocios privados y poner una farmacia,  nos regresamos a Chosica. Nos mudamos, al jirón Cusco, a las 8 casas una quinta donde el señor Manturano nos alquilo la casita, allí vivimos con mi hermano  Juan Carlos y su esposa ellos en el segundo piso, no nos fue tan bien en el proyecto de la farmacia y tuvimos que cerrarla. Por qué salimos de allí no recuerdo, por el afán de cambio nomas  creo.

De allí nos fuimos a una cuadra en el mismo jirón Cusco a un segundo piso a la casa de los Biondy, pero allí no vivimos ni seis meses la casa no me gustaba tenia mala vibra la sentía pesada, nunca vi nada  pero me daba miedo quedarme solo, era un departamento  en medio de un ambiente oscuro con ficus que protegían y daban mucha sombra,  allí me enferme del cólera, en la epidemia donde murieron miles. Yo decido salir. perdí la garantía pero salimos, de nuevo  a la casa de mi mama.

En la casa de Chiclayo 352 vivimos un tiempo pero también vivían mi hermana Marisol y su familia, no fue mucho tiempo, Sergio se quedaba en casa mientras íbamos a trabajar y Mey a estudiar allí le regale un cachorro siberiano, salimos  pronto de alli y nos   cambiamos cerca de mi hermano Juan que vivía en el  Cuadro  una urbanización en una quebrada antes de llegar a Chaclacayo, nos gustó mucho el sitio y vimos una casita de dos aguas con jardín y mucho espacio, y la alquilamos a los Kajats simpática pareja que vivía en Lima a ellos también íbamos a pagarles a su casa.

Bonita la casita,     todo iba bien, súper tranquilos tenía unos bonsáis que cuidaba y un perrito que se paraba escapando a vagabundear por todo el barrio. Había muchas casas vacías,  el vecino era un gringo yugoeslavo y su familia, que tenían una piscina a la que invitaban a Sergio.

Por allí una amiga del campamento del Bosque, Elisa, nos dice que su casa, caserón de Chosica, estaba sola que si queríamos ir,  precio de amigos, y bueno nos salimos del Cuadro para regresar a Chosica, a Tarazona.

 Casona tipo española con tres entradas una para la gente del servicio, la puerta principal y más allá una doble puerta de cochera que daba al inmenso jardín, y más allá a un descampado que daba al rio.

Casa antigua de adobe, con chimenea,  cocina inmensa, dormitorios de piso de madera  pasadizos amplios  rodeando la casa y el inmenso jardín con rosales, en la casa vivía la señora que hacia el trabajo doméstico anteriormente y tenían una mini casa en la parte lateral. La pasamos súper bien allí, hicimos más de una vez pachamancas con Víctor Flores y los amigos del fulbito del Bosque.

Hasta que un día, Nelly una entrañable amiga conversando que Mey había comenzado a estudiar en Lima y Sergio se quedaba solo, nos dice que tiene un departamento vacío  en Surco  en el Galeón , ovalo Higuereta a la derecha. Nos los prestaba, fue así que dejamos el caserón de Chosica.

Allí pasamos un año, Sergio pasó a estudiar al Carmelitas, fue una conjunción de oportunidades, porque no sabíamos dónde ponerlo. Y el Carmelitas ni por asomo por las cuotas de ingreso,y mensualidades no recuerdo como, pero fuimos a preguntar y ese año no había cuota o era muy pequeña así que allí fue a parar el hijo de las mudanzas.

No pasaría mucho tiempo  no recuerdo, pero nos regresamos a la casa de mi mama al segundo piso , creo que fue porque pensamos en construir en el segundo piso  y mi amigo del colegio, Jorge La Rosa, más conocido como Huico, nos hizo planos para dos departamentos uno para mi otro para mi hermano  Jorge, la idea se frustro y estuvimos viviendo allí hasta que Mey termino de estudiar y se fue a España a hacer unas prácticas en una cadena de hoteles al sur ,en Sevilla, a Huelva más precisamente a Punta Umbría.

Estando allí, le regale un perro labrador negro inmenso a Sergio que pasaba el día solo, lo bautizo Chico,  Zully y yo veníamos a Lima todos los días a trabajar, no nos acostumbramos a Chosica y le dije a Sergio búscame una casa por Chaclacayo, donde él estudiaba.  Encontró una a buen precio y linda.

Nos salimos mudando a Los Pinos, del parque seis cuadras al fondo. pegado al cerro. Una casa de una china , en realidad eran tres casas independientes con una sola entrada, con jardín, muy iluminada, de construcción reciente, dormitorios inmensos y cocina grande.

Había un  inconveniente, no querían perros pues su jardín estaba muy bien cuidado, Chico cachorro todavía, fue adoptado por una familia amiga, de otra forma no hubiéramos podido mudarnos, los hijos estudiaban en el San José y eran amigos de Sergio y Mey, no unió una gran amistad con los Higa, gente buena, que comenzamos a frecuentar. Sergio solía quedarse con ellos después del colegio hasta que regresábamos de trabajar.Chico vivió feliz con ellos.

Disfrutamos mucho la casa,  pero sacando cuentas de tiempos, gasto en gasolina pasajes, comenzamos a ver la posibilidad de comprar un departamento en Lima, el programa mi vivienda nos permitía un préstamo.

Vimos uno en la avenida San Felipe  y nos embarcamos en la compra, un año plazo entrega, Mey en España  alentándola a no regresar, Sergio  postulando a la universidad.

Había que ahorrar fuerte porque además de la cuota inicial en la que nos endeudamos  había que hacer los pagos mensuales y pagar el alquiler de la casa de los Pinos, además el futuro muy cerca del pago de la universidad  , regresar a la casa de mamá y no pagar estaba descartado, ir a Lima y buscar algo chico barato y temporal era la alternativa, entonces recordé que mi primo Sergio Licetti tenía una casita vacía en Chaclacayo, converse con él y accedió ,el mini departamento estaba a dos cuadras de donde vivíamos en los Pinos, un edificio antiguo de tres pisos de departamentos, el único en todo el distrito.

Me la dio a precio de primo , allí vivimos unos meses dejando cosas en la casa de mi madre y otras en la de los Contreras donde Sergio era otro hijo junto a Jose y Álvaro amigos desde El Santa Rosa en Chosica, donde nos hicimos grandes amigos de sus padres, Miguel y Nelly.

Hasta que nos entregaron el departamento. San Felipe 687 departamento 804.en el año 2005…

Continuara.

 pd faltan algunas mundanzas mas

agosto 2018 de vacaciones.


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